miércoles, 16 de noviembre de 2011

Carta a mi mejor amig@

Por favor, quiero que sepas que yo necesito que me sostengas. Aunque no te lo diga, y aunque a veces te diga que no.

Puede que por el momento no sea capaz de pedirte ayuda porque estoy bastante aturdida, pero siempre preciso saber que estás ahí.

Tienes que saber que yo no espero que hagas sentir bien ni que hagas que desaparezca mi pena. En este momento nadie puede. Lo que necesito es que me ayudes a calmarme, que aceptes mi dolor y que seas tan sabi@ como para soportar tu impotencia cuando no te dejo ayudarme.

Si no puedes llamarme porque no soportas tu dolor o no puedes aguantar el mío, dímelo. Yo lo voy a entender mejor que si me pusieras excusas de todo tipo.

Espero que puedas entender mis enfados y perdonar mis exabruptos. No eres tú ni los demás los que me enojan. Es saber que he perdido para siempre a quien más quería.

No trates de evitar mis lágrimas. Verme llorar puede ser duro para ti, pero es un modo saludable de expresar un poco de mi pena. Te aseguro que llorar es bueno para mí, por eso cuando me encuentres llorando trata de sentarte a mi lado y déjame llorar al lado tuyo, eso será un gran consuelo.

No trates de conformarme comparando mi pérdida con otras peores. Mi pena es mía e intransferibles. No me digas que lo que sucedió fue "porque Dios lo quiso". Oír esto no me consuela en este momento y sólo agrega confusión espiritual y desolación a lo que siento. No me digas "fue lo mejor que podía pasar" porque sé que no es verdad. No me digas "me imagino cómo te sientes". Nadie puede. En todo caso, por favor, pregúntame cómo me siento hoy y yo trataré de contarte.

No me pidas que "deje esto atrás, que olvide y que siga adelante con mi vida". Esta es mi vida.

Y entiéndeme si no puedo compartir los momentos felices que estás viviendo. Me gustaría poder.

Si quieres de verdad hacer algo conmigo, intenta ofrecerme encuentros específicos...un almuerzo, una tarea hogareña, una hora libre. Yo estoy demasiado herida para poder pensar más allá de hoy o para decidir un programa atractivo.

Necesito hacer el duelo. Necesito ser yo, y necesito no olvidar. Quiero sólo encontrar una manera de recordar en paz.

Te pido que me abraces, que me toques el pelo y que me digas que cuento contigo, que puedes estar a mi lado y que quieres acompañarme en este camino. El camino de las lágrimas, tan árido y fantasmal.

Finalmente, amig@ querid@ te ruego que aceptes mi duelo sin interferir y que admitas mi sufrimiento sin resistencias.

Yo siempre recordaré el amor sanador que ofreciste.

Gracias a tod@s, amig@s, compañer@s de trabajo, conocid@s y desconocid@s por formar parte de mi duelo. El texto que hay arriba de estas líneas ha sido escrito por Jorge Bucay (con un poco de adaptación propia). Lo pongo íntegro porque son las palabras que describen más cercanamente como me siento. No hay tiempos establecidos para el duelo. Sé que me quieres cuando me dices que era esperable, que era lo mejor, que ella sufría, que tengo que seguir, que han pasado dos meses... Pero de verdad, no hay tiempos ni era lo mejor ni tengo que seguir. Este es mi presente ahora. Y recordaré sin que duela. Pero ahora mismo es así.

Gracias por estar o no estar. Pero sobre todo, gracias por SER. Siempre recordaré el AMOR recibido de tantas maneras. Con palabras acertadas y con palabras menos acertadas. Con tus acciones acertadas y también con las menos. Detrás de todo, encuentro amor.

Dedicado a tod@s y cada un@ de vosotr@s.

6 comentarios:

  1. Ali, amor, gracias a tí por estar, por ser, por existir y por recordarnos que la vida está llena de momentos tristes, pero también de momentos lindos, de sueños por cumplir, de muros que superar y de gente maravillosa que, a nuestro lado algunas veces, y otras lejos, nos va enseñando que la vida sólo es esto: vivir. Gracias por ponerle color a la vida, algunas veces gris, pero en muchas ocasiones de múltiples colores. Gracias por quitarnos la venda blanca o negra.
    Me encantaría poder dedicarte un abrazo y una caricia cada día, o simplemente el día que lo necesites. Yo te los envío desde esta distancia, que para nosotras no es tanta, con toda mi energía para que te sientas, al menos, acompañada en este camino de las lágrimas.
    Gracias preciosa. Te quiero

    ResponderEliminar
  2. No te rindas

    No te rindas, aún estás a tiempo
    De alcanzar y comenzar de nuevo,
    Aceptar tus sombras,
    Enterrar tus miedos,
    Liberar el lastre,
    Retomar el vuelo.
    No te rindas que la vida es eso,
    Continuar el viaje,
    Perseguir tus sueños,
    Destrabar el tiempo,
    Correr los escombros,
    Y destapar el cielo.
    No te rindas, por favor no cedas,
    Aunque el frío queme,
    Aunque el miedo muerda,
    Aunque el sol se esconda,
    Y se calle el viento,
    Aún hay fuego en tu alma
    Aún hay vida en tus sueños.
    Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
    Porque lo has querido y porque te quiero
    Porque existe el vino y el amor, es cierto.
    Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
    Abrir las puertas,
    Quitar los cerrojos,
    Abandonar las murallas que te protegieron,
    Vivir la vida y aceptar el reto,
    Recuperar la risa,
    Ensayar un canto,
    Bajar la guardia y extender las manos
    Desplegar las alas
    E intentar de nuevo,
    Celebrar la vida y retomar los cielos.
    No te rindas, por favor no cedas,
    Aunque el frío queme,
    Aunque el miedo muerda,
    Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
    Aún hay fuego en tu alma,
    Aún hay vida en tus sueños
    Porque cada día es un comienzo nuevo,
    Porque esta es la hora y el mejor momento.
    Porque no estás solo, porque yo te quiero.

    Mario Benedetti

    Me encanta Benedetti y me encantan estos versos.

    Pero quizás de todo lo que dice, lo más importante es, de mi boca y no de la de Benedetti, que no estás sola y que te quiero...y además...lo sabes!!! :-)
    No sé cómo te has sentido ni cómo te sientes ni cómo te sentirás,no sé cuánto te duele tu dolor...pero lo que sí sé es que en cada sentimiento quiero estar y ser contigo.

    A tus pies... :)

    ResponderEliminar
  3. Alicia dicen "los profesionales" que el duelo dura dos años y he podido comprobar por desgracia que tienen razón. No por eso tenemos que estar sufriendo y regodeandonos en el dolor por la ausencia de esa persona .Esa actitud solo lleva a que esos amigos que nos quieren y han estado con nosotros acompañandonos durante la larga enfermedad " se cansen" por decirlo de alguna manera de seguir sufriendo. Ahora toca vivir la vida y disfrutar de esas buenisimas amigas que veo que tienes y que tu mejor que yo sabes que no te van a fallar nunca. Así que no te sientas nunca sola porque si han estado contigo en esos momentos duros que has pasado , seguro, seguro que lo seguiran estando.

    !!Se feliz!! La felicidad se contagia!!!

    ResponderEliminar
  4. Hola guapisima, como me gusta Bucay y como me gusta ese poema de Benedeti.... Te quiero, cuentas conmigo, puedo y quiero estar a tu lado y quiero acompañarte en tu camino.....

    Te dejo la entrada de una cancion que no va con tu estilo de Divina ja, ja ,ja.... Pero tiene un letra que tambien me gusta muchoooo.

    BESOSSSSSSSSSSSSS

    http://youtu.be/BalQSlMnqDE

    ResponderEliminar
  5. Eres más fuerte de lo que tú te crees. No sé cómo es tu dolor, porque es tuyo, pero quéjate que los demás te escuchamos, quéjate mucho cuando te duela y hasta donde te duela. El duelo tienes que pasarlo pero si es con abrazos y cariño mejor,ahí va mi abrazo

    ResponderEliminar
  6. Alicia, te mando un abrazo de los grandes, grandes y todo mi cariño!
    Dentro de poco conocerás a María Masika y estoy segura que te sacará muchas sonrisas!:-)

    ResponderEliminar